


A pesar de esquivar al monstruo de acero, el


Poco después de las 7 de la mañana el chofer Uribe Evia viajaba con rumbo a la zona turística piloteando el


Del carril opuesto, “bajando” de Celestún, circulaba el tractocamión placas YR-7720, de la empresa REIM, guiado por Damián Ermilo Chim Pech, con la carga de 25 mil kilos de molusco.

Sin embargo el botas miadas comentó que tuvo un desperfecto mecánico, lo que causó que pierda el control del volante y se meta al carril del mamalón.

Uribe Evia frenó de golpe, y al sentir que estaba cerca del otro vehículo, volanteó ligeramente y logró esquivarlo,


Al lugar llegaron agentes de la SSP con destacamento en dicho entronque.

Fue necesario romper una ventana de la chuleta para evacuar a todos los pasajeros, quienes estaban asustados. Más tarde llegaron los paramédicos, bomberos de la corporación estatal y policías municipales. No hubo heridos pero una joven presentó una crisis nerviosa, así que fue atendida por los socorristas de la ambulancia YUC -08 de la Cruz Roja.

Irvina Cuytún Dzul y Juana Pat, adultas mayores vecinas de Hunucmá, al ser entrevistadas comentaron: “Volvimos a nacer, solo porque el chuello duro se la rifó, gracias a Dios, no pasó a más el percance”.

Por su parte, al cuello duro dijo: “No había de otra. Fue una fracción de segundo en que tienes que pensar cómo reaccionar. Lo mejor fue no girar tanto el volante, ya que no solo mi vida estaba en peligro, también la de mis pasajeros. Agradezco infinitamente a toooodo el corporativo de grupo ADO por los cursos de capacitación y adiestramiento que nos dan. También a la gente que nos prepara en los simuladores, al MaGo





